El móvil de la mujer violada fue encontrado a unos 2 kilómetros de donde ocurrió el ataque.
El teléfono celular de la mujer violada el jueves pasado en Puerto Deseado por dos delincuentes que, además, asesinaron a su hijo de 4 años, fue hallado en la mañana de este lunes en la playa de Cavendish tras la confesión de uno de los sospechosos ante la Justicia.
Personal de la Policía de Santa Cruz realizó una inspección ocular en proximidades de la playa donde ocurrió el hecho y halló el aparato celular entre las rocas, mientras el juez de la causa Oldemar Villa se aprestaba esta mañana a ordenar el traslado del adolescente a un Centro de Detención Juvenil de Río Gallegos.
El otro detenido, un joven de 24 años que fue reconocido durante la rueda de reconocimiento, fue trasladado a una sede policial de la ciudad de Caleta Olivia para evitar una posible reacción de los vecinos y el juez del caso prevé indagarlo en los próximos días.
El magistrado tiene un plazo de diez días hábiles para indagar al sospechoso, quien en principio está acusado de los delitos de “rapto, abuso sexual con acceso carnal, tentativa de femicidio (en el caso de la mujer) y homicidio (en el caso del niño de 4 años)”.
El joven quedó formalmente detenido en la noche del sábado, luego de una rueda de reconocimiento en el que la víctima lo identificó como la persona que el jueves último la raptó junto a otro joven cuando caminaba por la playa Cavendish para luego abusar sexualmente de ella, golpearla y finalmente llevado cautivo a su hijo, a quien asesinaron a golpes en la cabeza.
Ese mismo joven ya había sido demorado el mismo viernes, horas después del hecho, pero el juez Villa decidió liberarlo porque no había logrado obtener elementos probatorios.
Sin embargo, horas después apareció una hermana de este sospechoso y le contó a los investigadores que su hermano le había confesado el crimen y la violación, por lo que el juez volvió a demorarlo y finalmente ordenó su detención.
Al momento de ser demorado por primera vez, el ahora detenido presentaba algunas heridas cortantes que pueden ser de defensa de la mujer violada, dijeron los investigadores.