Manuel Lanzini se jugará mucho contra Italia. Deberá asociarse con Messi y alimentar a Higuaín. FOTO MARCELO CARROLL

“Es como la semifinal de un Mundial”, dijo Sampaoli. Aparte de la vuelta de Higuaín, se juegan mucho Wilfredo Caballero, Bustos, Tagliafico, Paredes y en especial Lanzini.

Para Argentina, lo más importante no será el resultado, aunque nadie quiere regalar nada. Lo que busca Sampaoli, según dice, es afianzar la idea y sobre todo avanzar en la lista para el Mundial que entregará el 14 de mayo.

Entonces, saquen una hoja: examen para varios. Pero hay más: juega Messi y eso ya es un capítulo en sí mismo. Vuelve Higuaín, otro tema trascendente. Y hay cambio de dibujo: el técnico abandona la línea de tres en el fondo y pasa a los cuatro tradicionales. Están los que se frotan las manos afirmando que fue una sugerencia de los jugadores (no sería la primera de este plantel, recordar el retroceso de Sabella con su línea de cinco tras el debut mundialista), pero el técnico actual lo negó, aunque afirma que le gusta que los futbolistas opinen.

Como sea, es la chance para Fabricio Bustos y Nicolás Tagliafico. ¿Dónde más habría que poner el foco? Tal vez más que en ningún otro, en Manuel Lanzini. Abierto a la derecha, como volante creativo, el cuerpo técnico espera mucho del hombre del West Ham. Sampaoli habló de su capacidad para desequilibrar en el uno contra uno, por ejemplo. La Selección necesita un mediocampista que rompa líneas, que conduzca, que se asocie con Messi. También en el arco habrá novedades: con 36 años debutará Wilfredo Caballero, pero a no engañarse, porque el golero del Chelsea pelea un lugar en la lista y no la titularidad.

En la intimidad del cuerpo técnico se mira este partido con mucho respeto. Hasta se cree que puede ser más duro que el del martes ante España. Italia llega herida en su orgullo y eso suele ser un combustible inflamable. Lo dijo el DT argentino: “Para mí es como una semifinal de un Mundial, Italia es un grande”. En cambio, el cruce con los españoles estará muy condicionado por la agenda: ligas, Champions y cuidados varios. Nadie se quiere lastimar.

Italia, el gran ausente de Rusia, tiene a un técnico interino (el exvolante Luigi Di Biagio, dos veces mundialista) a la espera de una definición entre Roberto Mancini, Antonio Conte, Carlo Ancelotti o Claudio Ranieri. Tendrá en el arco a una leyenda, Gigi Buffon, quien con 40 años se empieza a despedir. Cuenta, además, con jugadores de jerarquía: Bonucci en el fondo, el brasileño Jorginho y Verratti en el medio, el goleador Immobile y el habilidoso Insigne adelante.

Argentina-Italia, como clásico que es, siempre tiene mucho para ofrecer.

Fuente

Comments

Comentarios