La líder de Hermanos de Italia se impone en las elecciones legislativas con la alianza que conforman la Liga y Forza Italia. De esta manera, tendrá la posibilidad de ser electa primera ministra.
Se espera que Giorgia Meloni, de 45 años, se convierta pronto en la primera mujer en ser jefa de gobierno de Italia en la historia, después de que su partido, los Hermanos de Italia (FdI), ganara la elecciones parlamentarias anticipadas este domingo.
La originalidad de su función proviene de un acuerdo de la coalición de derecha, que también tiene otro partido de extrema derecha, la Liga, de Matteo Salvini, y el conservador Forza Italia, de Silvio Berlusconi, de los cuales los más votados del bloque tendría la prerrogativa de indicar el próximo primer ministro.
¿Quién es la líder política que asumirá el gobierno italiano?
Nacida en Roma el 15 de enero de 1977, Giorgia Meloni se acercó a la política a los 15 años, cuando se incorporó al “Frente de la Juventud”, una organización juvenil vinculada al extinto partido posfascista Movimiento Social Italiano (MSI), que había sido creado por exmiembros del régimen de Benito Mussolini.
Cuando tenía 19 años, Meloni grabó un video diciendo que “Mussolini fue un buen político” y que “todo lo que hizo fue para Italia”.
A lo largo de los años, subió la escalera en la Alianza Nacional (AN), heredero del MSI, y fue electa concejala de la provincia de Roma en 1998, permaneciendo en el cargo hasta 2002.
En 2006 ganó un escaño en la Cámara de Diputados, más tarde se desempeñó también en el cargo de ministra de Juventud del gobierno de Berlusconi entre 2008 y 2011. En el mismo año, cuando fue elegida por primera vez al Parlamento, dio una entrevista en la que dijo que tenía una “relación serena con el fascismo”.
Respecto a Mussolini, dijo que el dictador “cometió varios errores, como las leyes raciales, la entrada en guerra y el autoritarismo”.
“Históricamente, ha hecho mucho también, pero eso no lo salva”, declaró entonces Meloni, ya cambiando un poco su discurso en relación a los años de juventud.
En diciembre de 2012, Meloni se unió a un grupo de disidentes de Alianza Nacional para fundar la FdI, que hasta el día de hoy exhibe en su distintivo la llama tricolor que simbolizaba al MSI. Preside los Hermanos de Italia desde 2014 y se ha ido ampliando su electorado por haber pasado la última década siempre en la oposición.
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"Italia pertenece a los Italianos, no a Úrsula von der Leyen. Que se vaya a la 💩." Así gritan los Italianos en multitudinaria concentración contra la Unión Europea. pic.twitter.com/kgA2MDMQxa
— Marta (@marthamarco_) September 25, 2022
En las elecciones parlamentarias de 2018, Hermanos de Italia obtuvo sólo el 4,35% de los votos. En los últimos años, Meloni ha mantenido el discurso radicalizado en temas como la inmigración y los derechos civiles – ella aboga por un bloqueo naval contra los inmigrantes del Mediterráneo y está en contra de la adopción de hijo por parte de homosexuales- pero trató de mostrarse más moderada en otras áreas.
Históricamente euroescéptica, la líder de FdI ya no habla de sacar a Italia de la Unión Europea. Además, es más crítica con el régimen de Vladimir Putin que sus aliados en la derecha italiana y varias veces condenó públicamente la invasión de Rusia en Ucrania.
Además, también está en contra de aumentar el endeudamiento del país para combatir la inflación galopante, tema que ya ha desatado tensión en la coalición con Salvini y Berlusconi.
Desde 2020, Meloni capitaliza el descontento de colectivos que van desde trabajadores despedidos a causa de la pandemia hasta autónomos penalizados por el Covid-19, también por los antivacunas, aunque dice que está inmunizada pero no hay fotos de su vacunación.
El FdI era el único partido importante en la política italiana que no se unió a la gran coalición que colocó y mantuvo al primer ministro Mario Draghi en el poder. Su aliados de la Liga y Forza Italia estaban en el gobierno junto al Partido Demócrata (PD), el populista Movimiento 5 Estrellas (M5S), el centrista Italia Viva (IV) y pequeñas agrupaciones de izquierda.
En los últimos años, Meloni también ha buscado distanciarse de movimientos abiertamente neofascistas como CasaPound y Forza Nova, históricamente cercana a la militancia de la FdI.