Los intendentes del PJ buscan tener certezas de que la ley que le pone límite a las reelecciones indefinidas en la provincia de Buenos Aires será revisada. Empujan una reunión con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, que hasta el cierre de esta nota no estaba confirmada. Sin embargo, la negociación también incluye a intendentes de otras fuerzas políticas que hasta el momento no han definido una posición unívoca y la discusión, para una modificación vía legislatura, será un trabajo artesanal para juntar las voluntades.
“Me parece que es un debate que hay que dar”, decía el gobernador bonaerense tiempo atrás al ser consultado por la revisión a la ley que limita a dos períodos los mandatos de gobierno de los intendentes de la provincia de Buenos Aires. Una norma que se sancionó en 2016 durante la gobernación de María Eugenia Vidal, en acuerdo con el Frente Renovador de Sergio Massa. Cuando esa ley se sancionó, un sector peronista dio quórum para habilitar la votación de la norma. Ahora, con los resultados de las elecciones legislativas donde el Frente de Todos quedó a menos de dos puntos de diferencia y llegaría a una instancia de paridad en la Legislatura bonaerense, un grupo de legisladores amparados por los intendentes creen que llegó la hora de revisar esa norma, que solo contó con el rechazo pleno de La Cámpora el 2016. Sin embargo, no será tan sencillo juntar voluntades.
En la cena que Alberto Fernández mantuvo con intendentes, Kicillof y otros funcionarios nacionales en la Quinta de Olivos luego del Día del Militante, el tema se puso sobre la mesa. Allí, el Presidente no clausuró la chance de abrir la discusión; por el contrario: “Es algo que están trabajando los intendentes, el Gobierno escucha y va a escuchar y en algún momento se va a tomar alguna decisión”, dijo la portavoz presidencial Gabriela Cerruti.
Pero quién sí avisó que no acompañaría la avanzada fue el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Sergio Massa. En ese mismo evento en Olivos dijo que el Frente Renovador no iba a votar una modificación y el massismo tiene peso suficiente en la Legislatura bonaerense con bancas propias. A partir del 10 de diciembre pasará de tener 13 a 16 lugares propios: 12 por la Cámara de Diputados y cuatro por el Senado, donde el escenario ya es de paridad absoluta para el FdT.
Pero además de los temas internos a resolver, la eventual modificación a la iniciativa no tiene un acompañamiento pleno de la oposición. Las aguas se dividen entre los intendentes de Juntos.
Algunos de los jefes comunales del PRO con asiento en el conurbano, que ya llevan dos mandatos al frente de su distrito y que de no haber modificaciones a la norma no podrán presentarse a una nueva reelección en 2023, sostienen que la ley está bien y que “habrá que trabajar en la construcción de la sucesión”.
Otros intendentes del mismo partido político están a favor del espíritu de la iniciativa que impulsó Vidal y con el que hizo gala de “ponerle fin a los barones del conurbano”, pero creen que debe haber una reinterpretación. Sucede que la ley toma como primer mandato el mismo en el que se llevó adelante la sanción, es decir el período 2015-2019, con lo cual cuestionan la retroactividad de la norma. “Las leyes se votan hacia adelante, no hacia atrás”, explican cerca de un intendente de peso dentro la estructura del PRO. Por eso, exploran la posibilidad de ir por otro mandato tomando como inicio de la norma el período 2019-2021.
En la Unión Cívica Radical, la foto es parecida. Si bien en su mayoría acompañan la medida que limita los mandatos, hay algunos jefes comunales con varios mandatos de gobierno en su haber: el caso más reconocido es el de Gustavo Posse que gobierna el municipio de San Isidro y llegará a 2023 con seis elecciones ganadas. La línea que manejan algunos intendentes del radicalismo es que “no se puede limitar la voluntad del pueblo a elegir”.
Pero también, acaso para esquivar la imposibilidad de ir a una reelección, algunos intendentes de la UCR fueron candidatos en estas elecciones. La vicepresidenta de la UCR bonaerense e intendenta de General Arenales, Erica Revilla, será senadora provincial por la Cuarta sección electoral, al igual que Claudio Rossi, quien deja la intendencia de Rojas para convertirse en diputado provincial por la Segunda sección electoral. Esa situación les permite tomarse licencia por dos años, no contar como mandato completo el período 2021-2023, pudiendo así volver a presentarse en 2023.
En el peronismo se dio el mismo fenómeno y también la designación de varios intendentes en distintos cargos ejecutivos. Los de mayor peso fueron las designaciones de Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) como Jefe de Gabinete bonaerense y Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) como ministro de Infraestructura y Servicios Públicos. Si bien los nombramientos ocurrieron por una tensión política suscitada luego del resultado de las PASO también tienen ese agregado. De no modificarse la ley, y si quisieran, ambos funcionarios provinciales podrían volver a candidatearse en sus distritos.
fuente: infobae