El Santo tuvo más de una posibilidad para para anotar en el marcador en el primer tiempo y parte del segundo, donde fue superior al equipo del mellizo pero lo termino perdiendo sobre el final
Boca logró pasar el sofocón de la mano de Esteban Andrada y pudo aprovechar las ocasiones que tuvo para clasificarse a los octavos de final de la Copa Argentina, al vencer este viernes a San Martín de Tucumán por 2 a 0.
San Martín fue más que su rival casi todo el encuentro y dominó el juego pero sin poder llegar al gol, el travesaño o la mano del arquero xeneixe evitaron que el equipo tucumano se pusiera en ventaja en el marcador.
La única respuesta de Boca en la primera etapa fue el tiro de Darío Benedetto que Ignacio Arce logró desviar y que luego dio en el travesaño. No hubo mucho más… Todo en el primer tiempo llevó la firma del equipo tucumano.
Pero el partido fue cambiando con el llegando a la mitad del complemento. El xeneixe mandó al campo a Carlos Tevez y comenzó a robarle la pelota a San Martín.
Edwin Cardona probó al arco de media distancia y no falló. Su pelota se desvió en el camino y Arce no tuvo más respuestas.
Fue el 1-0 para un Boca que parece estar acostumbrado a no manejar el juego, sino a esperar sus oportunidades y no desaprovecharlas.
La sentencia final llegó en los últimos minutos, con un penal de Ramón Ábila. “Wanchope”, recién entrado, se hizo cargo del tiro y “fusiló” a Arce.
San Martín pagó con la derrota no haber podido abrir el marcador ante un Boca, que sufrió algunas ausencias (Wilmar Barrios, Cristian Pavón…) pero aprovechó su amplio plantel repleto de figuras para hacer la diferencia sobre el final del partido y avanzar a octavos, donde ya espera Gimnasia.
El Santo tucumano no se volvió con manos totalmente vacías, sino que se trae la certeza que no hay rivales imposibles y que lejos de las diferencias de presupuesto o de grandes figuras, San Martín supo plantear el partido a el super