La caída del año finalmente se ubicaría por debajo del 2,5%, recortado fuerte las estimaciones de hace algunos meses. La caída de la inflación y la mejora de los salarios le dieron más impulso a la mejora.
Los datos que se van conociendo del cuarto trimestre muestran una reactivación más acelerada de la economía, incluso por encima de las previsiones.
Como resultado, la actividad terminaría con una caída de 2,5% o incluso menos, recortando las estimaciones que se habían realizado recientemente.
Esto significa que la economía argentina sale oficialmente de la recesión a fin de año. Esto se debe a que acumularía dos trimestres seguidos de repunte, que es lo que en el mundo se observa para determinar cuándo se termina un ciclo de caída de la actividad.
En el tercer trimestre, el PBI creció 3,9% en relación al trimestre anterior y se mantiene la tendencia de crecimiento en el cuarto trimestre, aunque más moderada luego del salto anterior. Previo a esto, la economía había mostrado tres trimestres consecutivos de caída de la actividad.
La recuperación, sin embargo, es muy heterogénea. Los que más impulsaron el rebote fueron agro, minería y energía, los grandes ganadores del arranque del gobierno de Javier Milei. Sin embargo, hay otros que vienen muy rezagados como la construcción y la industria manufacturera.
fuente: infobae