“Crónica de una muerte anunciada“. Así resume la salida de Alfonso Prat-Gay uno de los asesores más íntimos de Mauricio Macri en el primer piso de la Casa Rosada, minutos después de la conferencia de prensa de Marcos Peña.
Es paradójico: en el círculo más estrecho del Presidente y en el gabinete económico sabían que la salida del ministro de Hacienda y Finanzas era una carta que Macri podía jugar en cualquier momento. Pero Prat-Gay se mostró sorprendido esta mañana, cuando el jefe de Gabinete le comunicó la decisión en Casa Rosada, según confiaron altas fuentes oficiales. Después de ese encuentro, el todavía ministro se subió a un avión y voló hacia el sur del país para almorzar con el Presidente y conocer de primera mano el porqué de la decisión.
Lo que Macri le explicará en el almuerzo en Villa La Angostura, donde descansará hasta la primera semana de enero -tiene pensado volver a sus funciones el lunes 9-, es que no lo echa por sus resultados, sino por la gestión. “Alfonso es muy complicado. Tuvo buenos resultados, pero la decisión se toma por la cuestión operativa: no sabe trabajar en equipo“, asegura un colaborador presidencial que suele transmitir el pensamiento de Macri. “Diferencias que había en el diseño del funcionamiento del equipo“, maquilló Peña durante la conferencia. La relación con el jefe de los ministros, el funcionario más influyente, se había vuelto insostenible. Ese fue uno de los detonantes.
Un dato da cuenta de la complejidad en la relación entre el ahora ex ministro y el círculo íntimo del mandatario: Prat-Gay también egresó del exclusivo colegio Cardenal Newman, pero nunca trabó un nexo de confianza con Macri ni con los egresados de esa institución más cercanos que ahora lo acompañan en el Gobierno.
Macri tomó la decisión de correr a su ministro -que seguirá en funciones toda la semana- a mediados de la semana pasada, “entre el miércoles y el jueves“. Y se materializó por estas horas “porque ya se cerraron todos los temas económicos importantes”. “Aprovechamos que se terminaron todos los temas y es un fin de año tranquilo”, explicaron en el primer piso de Casa Rosada con notable optimismo. La discusión en torno al proyecto de ley de Ganancias retrasó la decisión presidencial. La presencia del ahora ex funcionario en la conferencia de la semana pasada tras la reunión con los gobernadores por ese debate estuvo en vilo durante varios minutos.
La salida de Prat-Gay y el ascenso de Luis “Toto” Caputo, que será el encargado del área de Finanzas, y la incorporación de Nicolás Dujovne, que tendrá Hacienda a cargo, descomprimen la tensión del gabinete económico y confirman el poder interno de Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, los vicejefes de gabinete encargados de la gestión. Se suma a la baja de Isela Costantini en Aerolíneas Argentinas, otra que no pudo encajar en el engranaje de mando de la Casa Rosada. Caputo y Dujovne entrarán en funciones tras un decreto presidencial, y se les tomará juramento recién a la vuelta de las vacaciones del mandatario.
Quintana y Lopetegui tienen un excelente vínculo con Dujovne, que trabajó en los equipos técnicos durante la campaña de Cambiemos y que en los últimos meses visitó en varias oportunidades la Casa Rosada. Tras la conferencia de prensa de este mediodía, la humorada era sobre la participación del economista como panelista del programa de la señal TN de Carlos Pagni.
En el caso de Caputo, Macri tiene una relación muchísimo más sólida que la que trabó con Prat-Gay. Su primo, Nicolás Caputo, es el más íntimo de los amigos del Presidente: con él despedirá el año en el exclusivo country Cumelén, de Villa La Angostura, donde el jefe de Estado y el ahora ex ministro almorzarán por estas horas para sellar la salida.