A poco menos de un mes del histórico secuestro de casi dos toneladas de cocaína en un campo cercano a Los Pirpintos (Copo) las fuerzas de seguridad nacionales estarían llevando a cabo tareas de inteligencia en la región, ya que sospechan que hay un cargamento de casi el doble de lo incautado, oculto en la zona “enfriándose”.
El dato no habría surgido de suposiciones ni conjeturas, sino de la palabra de uno de los dos detenidos el pasado 4 del corriente al momento de ser reducidos. Uno de los hombres atrapados cuando intentaban recoger los bultos “bombardeados” por una avioneta, habría deslizado que ésta era la “puntita” y aseguraba que días antes habían sacado del lugar un cargamento mayor, según lo reveló un informe publicado por el diario El Tribuno de Salta.
Las fuentes explicaron que bajo un absoluto hermetismo, personal de las distintas fuerzas de seguridad está desplegado en toda la región Noreste. Cabe resaltar que el secuestro se produjo a unos 24 kilómetros de la ruta 16, que une las provincias de Chaco, Santiago del Estero y Salta.
Despliegue
Según indicaron, gendarmes, policías federales, efectivos de Prefectura y Seguridad Aeroportuaria, entre otros, estarían llevando a cabo tareas de campo e inteligencia, en la que procurarían establecer silos camiones, tolvas y todo tipo de vehículos en los que se haya podido movilizar unas 3 toneladas de cocaína, que es lo que se sospecha, podrían estar siendo enfriadas en algún lugar de la región.
Los investigadores buscarían establecer cualquier indicio de esa índole, ya que quedó al descubierto que la banda dueña del cargamento secuestrado, operaba de esa forma. Bombardeaban la cocaína en los campos santiagueños, lo acopiaban en una tolva, lo camuflaban con granos, y de esa forma lo sacaban a las rutas para ser trasladados a un destino incierto.
Fuentes ligadas a la causa precisaron incluso que estarían siendo seguidos de cerca los pasos de “falsos productores” o personas que hayan realizado compras inusuales de granos en la zona en el último tiempo.
Movimientos
A partir del procedimiento de principios de mes, que significó un golpe millonario a las organizaciones narco, la investigación continuó para evacuar múltiples interrogantes que se dispararon tras el operativo.
Los 1.838,895 kilogramos estaban valuados en unos u$s 45 millones, por lo que los investigadores presumían que el destino de la droga, por su volumen y su calidad, era el mercado exterior.
Partiendo de esa sospecha, es que se investiga movimientos en zonas portuarias de la región, ya que sospechan que por esa vía era “exportada” la carga.
Medidas
Paralelamente, las fuentes apuntaron que las averiguaciones se profundizaron sobre los dos detenidos, ambos oriundos de Chaco aunque uno de ellos residía en Orán (Salta). Además quedaron bajo la lupa los dueños del campo y las personas que lo arrendaban, paradójicamente un tío de uno de los detenidos.
En el proceso hay dos hombres detenidos, pero las fuentes ligadas a la causa deslizaron que no se descartaba que haya más implicados en las próximas semanas.
Tras la feria judicial, las autoridades dispondrán nuevas medidas y la investigación tomaría un nuevo impulso.
Fuente: Elliberal.com