A la espera del fallo de la Corte Suprema de Justicia, el Gobierno redobla sus esfuerzos para rodear de apoyo político su decisión de aumentar las tarifas. Y ayer consiguió el respaldo público de diez gobernadores, de distintos partidos, y confía que en las próximas horas se sumarán las voces de otros mandatarios. Pero, al mismo tiempo, decidió congelar el adelantamiento de la audiencia pública, una idea trazada para enviar una señal política al alto Tribunal. ¿La razón? En la Casa Rosada prevén que el fallo es inminente, por lo que entienden que no llegarán a tiempo con los plazos para hacerla de manera “oficial”; y, además, consideran que ese gesto ya se dio al conceder que el ministro de Energía Juan José Aranguren exponga ante un plenario de comisiones de la Cámara de Diputados.
Casi con la misma intensidad que trabajó para sellar el proyecto de ley para acordar con los buitres, el ministro del Interior Rogelio Frigerio buscó apoyo en los gobernadores para adosar de volumen político al tarifazo, a sabiendas de que por estas horas la Corte se observa todos los movimientos del Gobierno. En ese sentido, pasado el mediodía de ayer, en Balcarce 50 resaltaban las declaraciones de los mandatarios. “Es muy importante el respaldo para que quede bien claro que la preocupación por la escasez de energía y su costo no es sólo del Presidente, sino de un grupo mayoritario de dirigentes con responsabilidad política”, razonó ante este diario un importante miembro del Gabinete, mientras repasaba los dichos de los gobernadores que, con algunos matices, respaldaron al Gobierno. ¿Qué dijeron?
“Hay que decirle la verdad a la gente: las tarifas han estado muy retrasadas todo este tiempo y no podíamos seguir de esta manera”, opinó el mendocino Alfredo Cornejo, de la UCR. El peronista entrerriano Gustavo Bordet admitió ser “consciente de que había que actualizar las tarifas” y que “era una situación que debía sincerarse”. La fueguina Rosana Bertone, también del PJ, se expresó en similar sentido y apuntó: “Quizá podemos discutir el mecanismo, pero no el sinceramiento de las tarifas”. Y el chaqueño Domingo Peppo dijo coincidir con el Gobierno en que “había que actualizarlas”.
Por su parte, el neuquino Omar Gutiérrez, del MPN, señaló que la medida del Presidente obedece a que “al país le falta energía”. “Esta situación se debe normalizar”, consideró.
Mientras, el peronista cordobés Juan Schiaretti recordó que “siempre” dijo “que la tarifa del gas estaba ridículamente atrasada”.
Aunque hubo apoyos esperados, como el de la bonaerense María Eugenia Vidal, el radical jujeño Gerardo Morales o el peronista salteño Juan Manuel Urtubey, a la lista se sumó uno imprevisto, el del santafesino Miguel Lifschitz, quien mantiene un duro enfrentamiento con Macri. En un claro mensaje a la Corte, el socialista estimó que “mantener el clima de incertidumbre es muy negativo” y advirtió que “no es conveniente retrotraer el cuadro tarifario establecido por el Gobierno porque sería muy complejo para las distribuidoras provinciales”.
Fuente: Clarín