A pesar de las fuertes críticas de los porteños por los incrementos de tarifas, el resto del país paga mucho más desde hace años.
Nadie en todo el país tuvo más aumentos en los servicios públicos en términos porcentuales desde la llegada de Mauricio Macri al poder que los habitantes de la zona metropolitana de Buenos Aires. En muchos casos, la cuenta supera el 1000 por ciento en dos años, algo que explica la molestia por los aumentos de tarifas y la efervescencia que el tema generó en la coalición de gobierno. Sin embargo, quienes viven en la zona metropolitana tienen todavía las tarifas más bajas del país, y pagan mucho menos que un vecino chileno, brasileño o peruano, sólo para poner algunos ejemplos.
Un usuario promedio de Edenor o de Edesur con un consumo mensual de 150 KWh pagó en diciembre pasado 8,84 milésimos de dólar por KWh (antes de la última tanda de aumentos), según el último informe de la consultora Montamat & Asociados. Al mismo tiempo, un santafesino debía desembolsar por la misma cantidad de electricidad US$141,6 milésimos y un cordobés, US$148,7 milésimos.
En tanto, un chileno que toma el servicio de la distribuidora Chilectra desembolsó US$150,1 milésimos, un brasileño, US$159,8 milésimos, un peruano US$ 154,3 y un uruguayo US$256,7, es decir, 29 veces la erogación de un porteño. Sólo México, con US$52,1 milésimos, está por debajo.
Algo similar ocurre en el gas. Según ese informe, una tarifa promedio estimada de gas en el país para un consumo de 894 metros cúbicos (m3) anuales es de $4,77 por m3, mientras que en Chile es de $18,28 y en Brasil, de $30,77, es decir, 6,4 veces el desembolso de un porteño.