Las dificultades del camino, la lluvia y la niebla no fueron impedimento para que los investigadores del Ministerio Público Fiscal llegaran a destino y así cumplir con una misión que tenían encomendada. El objetivo era trasladarse hasta la localidad de Lara, a unos 50 kilómetros de San Pedro de Colalao, para llevar adelante la pesquisa por la muerte de un adolescente de 16 años.
El sábado pasado, cerca de las 15:00 horas, desde la Fiscalía en Homicidios I, a cargo de Adriana Giannoni, el auxiliar de fiscal Lucas Maggio convocó al Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF) y a la División Homicidios de la Policía para llevar adelante una serie de medidas, que a priori convertirían al viaje en una verdadera travesía. A bordo de varias camionetas, la comitiva partió a destino. A ellos se sumó un equipo del Cuerpo Especial de Rescate y Operaciones (grupo CERO).
El primer destino
De un lado el cerro. Del otro el precipicio. Ese era el escenario por el que transitaban, con los recaudos del caso, policías y funcionarios del Ministerio Público Fiscal. Fueron cuatro horas de arduo viaje hasta arribar al primer destino. Lo más difícil era controlar los vehículos, ya que la noche, que le había ganado al día, llegó con mucha lluvia e intensa niebla. El camino cada vez más sinuoso y resbaladizo, compactado con piedra laja agigantaba las dificultades para la circulación.
Bajo esas condiciones desfavorables una de las camionetas se atascó, amenazando demorar la misión. El trabajo en equipo permitió que sea remolcarla y que la caravana continuara su lento viaje.
“Comenzamos a subir el cerro cerca de las 18:30 horas. De pronto empezó a llover muy fuerte. No obstante, continuamos subiendo, y en uno de los giros, en una erosión producida por el agua que caía de la parte alta del cerro, una de las camionetas se atacó. Gracias a la colaboración del grupo CERO pudimos sacarla. Luego accedimos a un refugio, el último lugar hasta donde se podía llegar con los vehículos. Nuestro objetivo estaba distante todavía. Ahí nos preparamos con los equipos y partimos caminando al lugar del hecho, en un paraje conocido como Costa Gonzalo, en Las Mesadas”, relató Javier Hidalgo, uno de los integrantes del ECIF que participó de la misión.
Eran cerca de las 20:00 horas del sábado cuando los investigadores arribaron a un refugio, donde fueron asistidos por sus moradores. Recibieron algo de alimentos, recobraron fuerzas y se alistaron para continuar su derrotero.
Entre quebradas
Las dificultades para comunicarse vía celular, debido a la falta de señal en alta montaña, presentaron un nuevo obstáculo. La necesidad de contactarse con la ciudad para recibir directivas y emitir los informes de rigor, fue subsanada tras la utilización de una radio de base.
Llegar al lugar del hecho no era tarea sencilla, pues se tornaba imposible continuar el viaje en los vehículos. La ruta no lo permitía. Había que continuar de a pies. Bajo esa complicada circunstancia, un grupo de baqueanos conocedores del relieve, fueron abriendo el paso, a caballo. Solamente después de una agotadora caminata de más de tres horas, entre quebradas y cuesta abajo, el equipo llegó al lugar del hecho, cerca de las 4:30 horas de la madrugada del domingo. Agotados y humedecidos los “viajeros” sintieron la satisfacción del primer objetivo cumplido.
Apenas arribaron, los investigadores tomaron intervención en la escena realizando las diferentes pericias y demás tareas que requería el caso.
Alrededor de las 7:00 horas, emprendieron regreso, esta vez, para llevar adelante el traslado del cuerpo, utilizando una camilla.
Cuesta arriba
También en el retorno contaron con la buena predisposición de los lugareños, que los asistieron con infusiones y comida caliente. “La gente del lugar nos colaboró en todo lo que pudo. Las condiciones fueron adversas, sobre todo en la noche del sábado, durante la caminata. Destaco la ayuda del ECIF, la Policía y los baqueanos”, comentó el auxiliar de fiscal Maggio.
Simultáneamente, otro equipo del ECIF, compuesto por camionetas y motocicletas enduro, partió desde la ciudad al encuentro de la comisión, llevando provisiones y ropa de abrigo. Una vez que llegaron al punto de encuentro, se reagruparon y emprendieron el regreso.
“Llegamos aproximadamente a las 4:00 horas y llevamos adelante la intervención. Se levantaron las evidencias que se encontraron y preservamos el lugar. Una vez finalizado ese trabajo, partimos de regreso alrededor de las 7:00 horas. El retorno fue con la ayuda de baqueanos, que eran los que nos iban guiando y así llegamos al refugio a las 11:00 horas del domingo, donde estaban los vehículos para hacer el traslado y regresar al MPF”, concluyó Hidalgo.
El caso
Una vez en la ciudad, el cuerpo de la víctima fue trasladado hasta la Morgue Judicial para ser sometido a la autopsia, por parte del Cuerpo Médico Forense del MPF.
Respecto al caso, las fuentes judiciales indicaron que se investiga la muerte del adolescente, causada con un arma de fuego. En ese sentido, habrá que aguardar los resultados de los informes médicos y otras pericias, además de las declaraciones de testigos, para determinar las circunstancias en las que ocurrió el mortal suceso.