La apertura del congreso además coincidió con el Día de la Industria Nacional, que se conmemora cada año el 2 de septiembre.
Con la presencia de referentes de la sacarotecnia mundial, el gobernador, Juan Manzur, asistió al flamante Centro de Convenciones de la Sociedad Rural de Tucumán, donde encabezó el acto de inauguración del XXX Congreso Internacional de Técnicos de Caña de Azúcar, que se realizará en la provincia hasta el 8 de Septiembre.
Manzur hizo la presentación de las jornadas junto a Jorge Scandaliaris, presidente de la Satca (Sociedad Argentina de Técnicos de la Caña de Azúcar); Sebastián Murga,presidente de la Sociedad Rural de Tucumán; Juan José Budeguer, presidente de la Estación Experimental; Jean Claude Autrey, secretario general de la International Society of Sugar Cane Technologists (Issct); y Philippe Rott, también de la Issct.
“Este encuentro marca un hito, porque es la primera vez en la historia que se hace en Tucumán. La provincia tiene una larga historia vinculada a la caña de azúcar, porque fue la primera industria pesada en la Argentina y en América Latina, y sus inicios fueron en nuestra provincia. Es por eso que este congreso tiene ribetes histórico y fundacionales”, sostuvo el Primer Mandatario tucumano en el discurso inaugural del evento.
Del encuentro, que comenzó el pasado 31 de agosto, participaron también el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales; funcionarios del Poder Ejecutivo provincial; representantes de la Corte Suprema de Justicia de Tucumán y legisladores provinciales y nacionales.
La apertura del congreso además coincidió con el Día de la Industria Nacional, que se conmemora cada año el 2 de septiembre. En ese aspecto, Manzur hizo referencia a la evolución de la producción de caña de azúcar y al valor agregado que adquirió en las últimas décadas, con la producción de biocombutibles.
“La caña de azúcar ya no es sólo azúcar, es energía que se produce con el esfuerzo de los gobiernos en forma conjunta con el ámbito industrial, el académico, las instituciones civiles y los productores, para cuidar el medio ambiente”, explicó el Gobernador.
Por su parte, Jorge Scandaliaris, presidente de la Sacta, explicó que desde hace 10 años se proyectaba la organización del congreso en la provincia. “Traer un evento así a la Argentina no fue fácil. En Tailandia ganamos la postulación y en consecuencia, en diciembre de 2016, empezamos a trabajar ya sobre el congreso”, indicó.
“Queremos construir un futuro mejor para la agroindustria del norte argentino que es el espacio donde puede desarrollarse la caña de azúcar. Este congreso coincide con la fuerte revalorización en el mundo que tiene esta materia prima, en función de su aporte como energía renovable”, destacó Scandaliaris.
El intercambio de información durante los ocho días de duración del congreso, entre los científicos, técnicos y productores de diferentes países, permitirá atraer innovación y valor agregado a la producción de la caña de azúcar a la provincias del NOA.
Centro de convenciones
Para el Congreso era necesario contar con un amplio centro de convenciones. Por ese motivo, remodelaron el predio de La Rural donde habitualmente se hace la Expo. Se invirtió 1.100.000 de dólares. El espacio se acondicionó a nuevo, instalaron aires acondicionados, alfombras, un portón y sillas. Tiene capacidad para 1.800 personas. Durante sus extensas jornadas, asistirán 2500 personas de varios países del mundo.
Más de 400 ponencias
Esta edición del congreso dedicada a la caña de azúcar contará con más de 400 “papers” y los más eminentes especialistas del mundo que presentarán trabajos de gran relevancia científica: Plinio Nastari, de Brasil, “Expansión de los Biocombustibles”; Keith Jaggard, del Reino Unido, “Caña de Azúcar vs. Caña de Remolacha”; Jean Claude Autrey, Islas Mauricio, “Factores Económicos y Competividad de la Caña de Azúcar”; Robert Steindl, de Australia, “Diseño de Ingenios”; Nigel Minton, Reino Unido, “Estudios de Digestión del Bagazo” y Ricardo Abe, Brasil, “La Tecnología SOFC aplicada a vehículos eléctricos” y Manoel Regis Leal, Brasil, “El proyecto SUCRE de Brasil para el uso de malhoja”.