Jujuy es sinónimo de Carnaval y la gente lo sabe, por eso este fin de semana la provincia norteña se llenó de turistas y de comprovincianos con ganas de divertirse y de festejar, con el desentierro del “diablo”, en la fiesta más popular del mundo.
Desfiles, copleras, recitales, comparsas, rituales, todo un combo de alegría, bailes regionales y juegos, despiertan la algarabía de la gente que con los pomitos de nieve, talco perfumado y papel picado, se encargan de “disfrazar” a los concurrentes para que pierdan la timidez, se olviden de los prejuicios, de la política, del fútbol y de todos los problemas que los puedan aquejar.
La ciudad capital, Tilcara, Humahuaca, Maimará, y todos los pueblitos que surgen en la montaña jujeña tienen algo para ofrecer en esta fecha a los “carnavaleros”, pero hay un lugar que es muy especial y que combina el Carnaval con la fiesta de la Pachamama: Es en León, ubicado a tan sólo 25 kilómetros de San Salvador de Jujuy, siendo uno de los primeros en la subida del departamento Doctor Manuel Belgrano a través de la Ruta Nacional 9.
En León se encuentra la casa de la familia Pelucio, donde Nora y Hugo agasajan a todos los que se acercan a su casa a festejar, convirtiendo el lugar en una gran peña donde reina la alegría, la amistad y camaradería.
Los Pelucio no se privan de nada: ofrecen a los visitantes comidas regionales (picante de mondongo y empanadas) y bebidas ´para todos los gustos, papel picado, serpentinas, talco, y una gran orquesta que toca sin parar, mientras los bailarines demuestran sus habilidades. Un detalle para destacar: Todo es gratis!!!
En diálogo con los organizadores, comentaron que esta fiesta se realiza desde hace más de 50 años y que comenzó siendo familiar. Luego, con el paso del tiempo, se fue sumando a los vecinos hasta que hoy en día es para todos los que quieren participar y pedir a la “madre tierra” por una cosecha mejor (en agosto se agradece a la pacha).
En agradecimiento a la madre tierra no cobran nada. Todos colaboran. La fiesta es a beneficio de los padrinos y madrinas conocidos de las familias organizadoras. Lo único que quieren es que todos la pasen bien, se sientan cómodos y festejen a la Pachamama en pleno carnaval.
Diario Cuarto Poder (por Fabián Seidán, enviado especial a Jujuy)