En un caso que ha conmocionado a la sociedad argentina, Jesús Ángel Villagra, un joven de 25 años y cuidacoches, fue imputado por el femicidio de Paula Alessandra Octaviano, una joven de 20 años que había estado desaparecida desde el 12 de diciembre.
Los restos de Paula fueron encontrados calcinados en un descampado cercano a la ruta Alternativa de Alderetes el 17 de diciembre, lo que desató una serie de investigaciones policiales que revelaron detalles escalofriantes sobre el crimen.
La última vez con su madre
La historia comenzó cuando Paula dejó su hogar en el barrio Oeste II, informando a su madre, Silvia Susana Molina, que iría a visitar a Villagra. Esta fue la última vez que su madre la vio con vida.
Con el paso de las horas y la ausencia de su hija, Silvia decidió acudir a la casa de Villagra en busca de respuestas. Según el relato del acusado, había estado con Paula en un bar cercano a la terminal de ómnibus, y se había marchado porque ella se reuniría con un amigo.
Desesperada, Silvia denunció la desaparición de su hija en la comisaría 11.
Sin embargo, la investigación dio un giro cuando la cuñada de Villagra alertó a la policía, informando que su hermano había confesado el asesinato de Paula.
Homicidio agravado por femicidio
La Fiscalía de Homicidios II, liderada por Carlos Sale, tomó el caso y, tras recopilar las evidencias necesarias, imputó a Villagra por homicidio agravado por femicidio. El fiscal presentó su argumento ante el juez, explicando que el crimen ocurrió mientras ambos se dirigían a visitar a la hermana del acusado.
En un momento, Paula solicitó que detuvieran la motocicleta para ir al baño, y fue entonces cuando Villagra, aprovechando su superioridad física y la vulnerabilidad de la joven, le arrojó una sustancia inflamable, causándole heridas que finalmente llevaron a su muerte.
El informe preliminar de la autopsia reveló que Paula fue quemada viva y que presentaba lesiones defensivas, lo que indica una lucha por su vida. Estas circunstancias han llevado al fiscal a calificar el crimen como aberrante y violento, destacando el desprecio total hacia la vida de la víctima.
Actuó solo
Además, Sale insinuó que no se descarta la participación de otros familiares de Villagra en el encubrimiento del crimen, ya que se alegó que el imputado había solicitado ayuda para deshacerse del cuerpo. Si bien uno de sus hermanos fue detenido, posteriormente fue liberado por falta de evidencias suficientes.
Dada la gravedad del caso y la naturaleza de los delitos imputados, el juez Guillermo Taylor dictó cinco meses de prisión preventiva para Villagra, que se extenderán hasta el 16 de mayo de 2025.
Este caso ha dejado una profunda huella en la comunidad, reavivando el debate sobre la violencia de género y la seguridad de las mujeres en el país.