Un tucumano fue encontrado sin vida este miércoles frente al cementerio de la localidad santiagueña de El Charco, departamento Jiménez.
Alrededor de las 8 de la mañana de este miércoles, personal que brinda servicio en el cementerio de El Charco advirtió la presencia de un vehículo estacionado a la entrada. En el interior se encontraba un hombre.
Los trabajadores ingresaron a cumplir con sus labores, pensando que se trataba de una persona que estaba esperando por ingresar a cumplir con el ritual de visitar a quienes tenían allí sepultados.
Tras algunas horas, los trabajadores advirtieron que el hombre seguía en el lugar. Fue así que se aproximaron y observaron que la persona en su interior tenía su pecho manchado de sangre. Dieron aviso a la policía.
Con la llegada de la policía, tomó intervención el Fiscal Carlos Vega quien informó, que en el interior del vehículo se encontró un arma de fuego calibre 22 Largo, dos cartas, la identificación del fallecido y en el asiento posterior ropa colgada de una percha, la cual tenía una nota con instrucciones precisas.
Ocaranza dejó una carta explicando los motivos de su decisión, diciendo “quiero estar con mis padres aquí”, sin embargo el fiscal hará una exhaustiva investigación del caso para descartar que se trate de un hecho delictivo.
En el lugar también trabajaron efectivos de la División Criminalística, los que se encargaron de levantar y trasladar cada uno de los elementos presentes en el interior del rodado.
El fiscal también informó, que durante la tarde de este miércoles se llevó a cabo la autopsia de José Luis Enrique Ocaranza (59), con domicilio en la provincia de Tucumán según consta en el DNI del fallecido.
También arribaron familiares, un sobrino y un primo, quienes reconocieron el cuerpo y el vehículo, los que indicaron que el desencadenante de la fatal decisión de su pariente, podría haber estado dado por un bajo estado anímico producto de una situación familiar.
fuente: diariopanorama