La Fundación Argentina de Ecología, representada en el polémico viaje a Corea por gente cercana a José Cano, firmó la compra de aparatos para el ahorro energético con la filial coreana de la firma ESSCOM Japan Co. Ltd. por un monto de $315.000.000. No se explica el porqué de la participación en la comitiva.
Los sumarios ordenados por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, hacia quienes integraron la comitiva que visitó la filial coreana de la empresa ESSCOM Japan Co. Ltd, siguen su curso, mientras que trascendió que en el mencionado viaje, la Fundación Argentina de Ecología firmó la compra de equipamiento relacionado al ahorro de consumo eléctrico por una suma millonaria.
Cabe señalar que, según las publicaciones de medios digitales de ese país asiático que los empresarios coreanos aportaron a Cancillería en su queja formal, un representante de la mencionada fundación habría firmado la compra de equipos para el ahorro energético, una de las especialidades de ESSCOM por un valor de $315.000.000.
Lo que no se explica es la vinculación que tiene la mencionada fundación con el Plan Belgrano, que conduce el tucumano José Cano, ni tampoco la razón por la cual integró la mencionada comitiva su representante, que en los medios coreanos figura como vicepresidente.
Pese a que también se especula con la firma de un acuerdo con los empresarios coreanos, de cuya validez dudaron los asiáticos y que generó el reclamo vía cancillería y el inicio de los correspondientes sumarios, sorprende el monto del que dispone la mencionada fundación para la adquisición de esta tecnología que tiene usos específicos.
El intento de desligarse de la relación con aquellos que integraron la comitiva argentina, por parte del titular del Plan Belgrano, cayó en saco roto cuando surgieron las designaciones que prueban la relación de uno de ellos con su equipo de trabajo.
Cabe recordar que el escándalo estalló luego del viaje a Corea para entrevistarse con los directivos de la firma internacional que, en realidad tiene su casa central en Japón. Las reuniones con la CEO de la empresa, Kanno Atsuko existieron y se habría firmado un acuerdo. La falta de protocolarización del mencionado documento y las dudas sobre la validez, hicieron que los empresarios acudieran en queja a la Cancillería Argentina. Desde allí, por temor a un conflicto diplomático con los potenciales inversores, se derivó el problema al propio jefe de Gabinete, quien dispuso el inicio de los respectivos sumarios, a fin de determinar las responsabilidades de cada uno de los participantes del viaje.
La actitud de Cano y de sus colaboradores fue despegarse de cualquier vinculación con los sumariados y descalificar al Diario Cuarto Poder y su propietario y directivo, el profesor y periodista Manuel Ernesto Rivas. Sin embargo, se demostró con documentación a la que tuvimos acceso, que las vinculaciones existen y que, probablemente se llegue a determinar qué es lo que se firmó en Corea y cuál es la verdadera razón del enojo de los empresarios de ese país.
Por la banca de diputado
El escándalo habría afectado aún más la alicaída imagen del Plan Belgrano y de su conductor, quien analiza una salida decorosa para postularse como candidato a diputado en las próximas elecciones.
Cabe recordar que su relación con otros integrantes fuertes del gabinete nacional, como el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, no eran de las mejores. Y eso se nota en el apoyo que éste le estaría dando al actual secretario nacional de la Vivienda y Hábitat, el tucumano Domingo Amaya, quien se encuentra en directa dependencia dentro de la estructura del gobierno de Mauricio Macri. Las elecciones no están tan lejos y las PASO tendrían la última palabra.