Desde esta medianoche, la mayoría de las petroleras aplicaron una suba del 27% en el valor de sus combustibles, lo que podría llevar el litro de súper por encima de los $700 aún en algunas localidades del país, entre ellas la Ciudad de Buenos Aires. Se trata del primer aumento del año, tras haber registrado fuertes incrementos en diciembre, en el marco de la devaluación del peso y el descongelamiento de precios. La cadena YPF no aplicó subas todavía y mantiene los precios de ayer.
En detalle, el litro de súper saltará de los actuales $553 a un valor de $702. La nafta premium, por su parte, podría llegar a los $868, el diésel común a $750 y el diésel euro a $944. De todas formas, se trata sólo de cálculos estimativos realizados sólo en base a los valores en surtidor de YPF (empresa de mayor participación en el mercado) dentro de Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El actual incremento es la tercera suba fuerte del precio de los combustibles en menos de un mes. El primer gran aumento se produjo en la última semana del gobierno de Alberto Fernández, cuando las petroleras aplicaron un ajuste promedio del 30% en el precio final de los destilados, aprovechando el fin del congelamiento firmado con la gestión anterior.
Luego, tras el salto del dólar oficial que se dio el miércoles 13 de diciembre, los valores en boca de expendio volvieron a dispararse. A pocas horas del debut del nuevo precio del dólar, las compañías aplicaron aumentos de entre el 30 y el 37% en todos sus productos.
Con este aumento el litro de nafta se acerca rápidamente al valor histórico de un dólar. Con un incremento del 27% de la nafta súper promediará los $700 y la premium se venderá aproximadamente en $900. En principio serían las petroleras privadas quienes ajustarían sus precios: desde YPF aún no hay confirmación.
Otro fuerte incremento se dio el 8 de diciembre. Habían hecho punta las petroleras privadas con un promedio de 30% y una semana más tarde ajustó YPF. Una semana antes, las petroleras habían aumentado un 7% en acuerdo con el Gobierno dentro del marco de los acuerdos de combustibles. En noviembre, el ajuste había sido del 12%.
Así, este último se convierte en el primer incremento del año tras dos subas fuertes en diciembre. La decisión sería consecuencia directa de la medida de la Secretaría de Energía, que el 28 de diciembre dispuso incrementos para el biodiesel y el bioetanol que van del 28,45% al 34,44%. Se esperaba que las petroleras trasladen, al menos en parte, el mayor costo al precio final de los combustibles, pero a la vista de los porcentajes, estarían trasladando casi la totalidad.
En 2023, los precios de la nafta y el gasoil tuvieron remarcaciones todos los meses, excepto en septiembre. En números, el litro de súper comenzó el año en $150,90 y finalizó en $553, lo que representa un incremento del 266,22%. En tanto, el litro de premium pasó de $185,90 a $684, lo que arroja una evolución del 267,74%.
fuente: infobae