Una niña de seis años permanece internada en grave estado tras ser succionada por el filtro de la bomba de agua de una pileta mientras practicaba natación.
El accidente se produjo anoche en el Club Universitario de Córdoba y la nena, llamada Samira, permanecía internada en el Hospital de Niños local en coma y con respirador artificial.
Luciano Parietti, director del Hospital de Niños, informó que la nena “está bajo un coma farmacológico, un coma inducido para soportar el respirador” mecánico. “Se decidió que todavía no se bajará ningún parámetro y continuará con el respirador”, agregó.
El profesional fue cauto a la hora de brindar un diagnóstico, aunque encontró síntomas alentadores en el resultado de los estudios que le realizaron y en el hecho en el que la niña recibió una buena atención inmediata. “El electroencefalograma dio que tiene buena actividad pero hay que esperar”, dijo. También subrayó que “un médico y una profesora le hicieron maniobras de reanimación muy buenas y rápidas”.
Todo comenzó cuando la niña nadaba en presencia de sus padres, quienes notaron que no volvía a la superficie. Se había trabado un pie con el filtro. Tanto la madre como su esposo y otras personas se arrojaron al agua y lograron rescatar con vida a la pequeña.
“Me metí yo, se metió mi marido, y también los profesores. Nosotros salimos porque no podíamos sacarla. Luego lo lograron, la revivieron, afortunadamente salió con latidos en el corazón“, contó Bárbara, la madre. “Fue un accidente, no hay culpables. Nosotros nunca la dejamos sola”, advirtió en declaraciones a la radio Cadena 3.