Las provincias terminan de definir los protocolos, pero se impone el certificado médico como requisito primario. Qué pasará si hay contagio en medio de la vacación, cupos para carpas y sombrillas y acceso a los parques.
Los centros turísticos se preparan para una temporada que, en el mejor de los casos, estará cargada de complejidades. Mientras terminan de definir con la Nación algunos protocolos a aplicar, y en el caso de las provincias hacen estimaciones de cómo puede llegar a ser la curva de contagios, los intendentes de los centros que suelen tener la mayor afluencia de visitantes ya comenzaron a preparar sus propias exigencias.
La Costa Atlántica
Uno de los que están más avanzados en las conversaciones son los del municipio de La Costa. Mientras conversan con el gobernador Axel Kicillof la idea de extender la temporada de noviembre a marzo, en paralelo hablan con el ministro de salud, Daniel Gollián, para incrementar la cantidad de camas vía la llegada de alguno de los 12 hospitales móviles emplazados en el conurbano y la puesta en marcha de hospitales de campaña en manos de las fuerzas armadas.
En el caso de las provincias que suelen concentrar una mayor demanda, como por ejemplo Córdoba, Río Negro, Entre Ríos, Salta, las fuentes consultadas coincidieron en destacar que dependerá el estado de situación para saber si abren sus fronteras o no.
“La potestad está en manos de los gobernadores, ellos nos avisan a nosotros”, explicaron desde Jefatura de Gabinete de la Nación. “No llevamos un registro de quién está abierto y quien no porque es muy dinámico”, agregaron desde la Casa Rosada.
Lo mismo sucede en el Ministerio de Transporte. “Nosotros trabajamos para la vuelta de los vuelos y los micros de mediana y larga distancia, pero dependen de los gobernadores si abren los aeropuertos y las fronteras y qué requisitos le piden a los visitantes”, explicaron desde el entorno del ministro Mario Meoni.
Oferta de vuelos
Muchas de las provincias receptivas de turismo están a la espera de que el 1 de octubre vuelvan los vuelos de cabotaje. En especial las más alejadas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Según anticiparon fuentes oficiales, durante octubre se realizaría una prueba piloto con destino a Bariloche, en la provincia de Río Negro. Esa experiencia serviría para probar como funcionan los protocolos turísticos -de hotelería y gastronomía- que se definieron para todo el país.
Pero, a pesar de esa referencia, la decisión dependerá de cada distrito y según confiaron fuentes oficiales, hoy hay 10 provincias que ya le avisaron al Gobierno nacional que no están en condiciones de recibir vuelos por el crecimiento que está teniendo el COVID-19 en sus jurisdicciones.
Aunque los nombres de los distritos se mantienen en secreto, una fuente oficial dijo que “son aquellas que muestran la mayor cantidad de complicaciones en relación a la cantidad de casos y camas disponible. Dejando de lado Buenos Aires, los que están más complicados hoy son Jujuy, Misiones, Formosa y Córdoba estaba en duda, porque en principio tenía la intención de aceptar turistas pero sólo lo que lleguen en auto”.
El modo en la cual se trasladen es un tema en discusión por la resolución que puede llegar a tener un contagiado que esté alquilando.
A La Costa en auto
Teniendo en cuenta que las estadísticas muestran que siete de cada 10 que visitan la costa argentina lo hace en su propio vehículo, en el partido de La Costa ya es casi una decisión tomada que aquel que esté de vacaciones y alquilando una vivienda registre COVID-19 y no necesite internación “deberá volver en su auto a su lugar de origen a hacer la cuarentena”.
En la misma línea, los balnearios bonaerenses están terminando de definir la posibilidad de pedir un certificado de hisopado o PCR pero eso sólo sería una parte del problema.
Hay temor a que empiecen a circular certificados de dudosa procedencia por lo que se está analizando utilizar un sistema blockchain, como el que regula a las criptomonedas, para “encriptar” los certificados médicos pero “es algo que tiene que decidir y definir la Nación”.
Aglomeración en la playa
Parece más difícil encontrar una solución a las aglomeraciones en la playa y a la posibilidad de que alguien que alquile contraiga el virus y tenga que hacer una cuarentena en el lugar. “Se está conversando el traslado de hospitales móviles y también con las prepagas para que garanticen el servicio a sus afiliados en una zona en donde no tienen una red tan aceitada”, contó a Infobae un intendente del Partido de la Costa que el verano pasado tuvo 100% de ocupación.
Respecto de las playas y los balnearios, el Ministerio de Turismo de la Nación definirá en las próximas semanas cómo será el protocolo y una posibilidad cada vez más cierta es que que se establezca un cupo de cantidad de personas que puedan permanecer en cada balneario el mismo tiempo. Por la larga extensión de las playas bonaerenses las autoridades confían en que podrá implementarse.
Por su parte, Mar del Plata presentó este viernes su protocolo para ir a la playa. Entre las medidas especificadas que presentó la Cámara Empresaria de Balnearios Restaurantes y Afines del partido de General Pueyrredón, se encuentra un límite de ocupantes para carpas y sombrillas además de uso obligatorio de barbijo y ojotas.
Además, ya se establecieron los precios para el alquiler mensual de una carpa: se ubicarán entre $90.000 y $140.000 desde el norte de Mar del Plata hasta la zona de Playa Grande y el sur, en camino a Miramar.
Otros puntos turísticos
El hisopado parece imponerse como la regla básica para poder ingresar. En realidad se está terminando de elaborar un paquete de nueve protocolos para las provincias y cada una agregará lo que crea necesario.
La regla de presentar un hisopado realizado con 72 horas de antelación se impone. Así ya lo estableció el distrito más austral del país, la Ministro de Gobierno de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, Adriana Chapperon, anunció que a partir del próximo vuelo que ingrese a la provincia se solicitará el examen previo a todos los pasajeros y que eso se repetirá como modo preventivo.
Chubut, Córdoba y Mendoza
La misma decisión tomaron en Chubut, en donde los que quieran visitar la provincia deberán tener un hisopado y una declaración jurada.
Lo mismo está terminando de definir Córdoba y Mendoza. En estos distritos el turismo interno ya está habilitado por lo que cuentan con cierta gimnasia de parte del sector privado para avanzar en esta línea.
Así, por ejemplo, los hoteles ya tienen establecido que no podrán ocupar más del 50% de las plazas y los desayunos serán acotados en el mejor de los casos.
Para los visitantes, el uso de barbijo o tapa boca será obligatorio para circular en los lugares comunes; las fuerzas de seguridad comunales controlarán que no haya aglomeraciones por lo que ya casi están descartados los eventos como la fiesta de la Vendimia o Cosquín.
Tapaboca y desinfección
Un ejemplo de cómo será el tránsito de muchas de las provincias en donde hay parques nacionales es el protocolo que aplicará Misiones. Los turistas que quieran ingresar serán recepcionados por un operario quien será el encargado de verificar el uso correcto del tapaboca, de guiar y controlar el paso de cada individuo por la cabina de desinfección. Luego accederá a una bacha para el higienizado de manos, se procederá a la medición de temperatura mediante un termómetro infrarrojo. Si la persona no presenta una temperatura superior a 37.5 °C, se le permitirá el ingreso, en caso contrario, será aislada.
A la hora de sacar las entradas, se le pedirá a los visitantes nombre y apellido, teléfono, procedencia y hora de ingreso, si tuvo el virus o si estuvo en contacto con una persona contagiada. La misma servirá de declaración jurada; si fuera un contingente se exigirá el manifiesto de viaje con los mismos datos.
fuente: infobae