Por Fabián Seidán de Diario Cuarto Poder. Se vienen las vacaciones de verano y la gente al hacer números para ver si podrá salir en familia, se agarra la cabeza. Todo está tan caro que sólo los más pudientes o los que ahorraron, se animarán a alquilar en alguna playa; mientras que los más audaces usarán sus vehículos para trasladarse a un lugar de veraneo en la costa.
Vacaciones eran las de antes…
Llega octubre y -como todos los años- la gente comienza a planificar las vacaciones de verano. Aunque -esta vez- muchos deberán afinar bien las puntas de sus lápices y la calculadora, para ver si pueden salir y, en todo caso, a dónde, cómo y cuándo.
El problema es que la inflación se come día a día el salario de los trabajadores y los precios de los viajes, paquetes y alquileres, se modifican al ritmo del dólar blue.
Pese a que la portavoz de Presidencia, Gabriela Cerruti, minimiza a este tipo de cambio (“El dólar blue no es una preocupación para el Gobierno”, dijo) lo cierto es que todo, absolutamente todo, se rige por la divisa libre en nuestro país, al punto tal de que si alguien va a comprar un neumático, un paquete turístico o intenta canelar un alquiler en la costa, antes de cerrar la operación el vendedor o propietario revisará el valor actualizado del billete estadounidense.
Pero no sólo el dólar blue digita la subas de precios en nuestro país. También lo hace la suba de los combustibles. Muchos que no tienen vehículos a motor creen que el aumento de las naftas no incide en ellos, pero lo cierto es que afecta y perjudica a todos por igual, porque al incrementarse los combustibles, el transporte, el comercio y la industria transfiere parte de esa suba a los demás sectores, incluso (sobre todo) a los consumidores.
Otros elementos que encarece todo en Argentina son los aumentos en los servicios públicos como luz, gas y agua; y los costos financieros de las tarjetas de créditos. Todos esos incrementos son transferidos al consumidor final. Siempre.
Dólar Blue, turista, dólar Qatar…
Esta semana el Gobierno anunció que los consumos en moneda extranjera con tarjeta de crédito y débito (dólar turista) que superen los 300 dólares al mes pagarán una percepción extra del 25%. Ese porcentaje de suba termina afectado todo el circuito económico y monetario del país. Hoy el dólar Blue ronda los $290, y el dólar Qatar pisa los $316 pesos. En tanto, el dólar turista, el que se puede utilizar para realizar compras en el exterior con tarjeta de crédito o débito con un cupo de hasta 300 mensuales. Su valor surge del precio del dólar minorista más un 30% del impuesto PAIS y un 45% de adelanto del impuesto a las Ganancias y a los Bienes Personales: Cotiza a $275.
El nuevo Dólar Qatar (turista sin cupo) es el último que se implementó y es para realizar consumos con tarjetas en el exterior cuando se supera el cupo de hasta 300 dólares mensuales.
Inflación por las nubes
Como si fuera poco, los analistas económicos de las más prestigiosas consultoras esperan que la inflación alcance un piso mínimo de 95% y de 104% como techo, interanual a fin de año (las paritarias de la mayoría rondó 60%), por lo que desde ya hay una pérdida significativa del salario.
De acuerdo con las proyecciones realizadas por más de 40 consultoras y relevadas por la firma global FocusEconomics: “La inflación subió a 78,5% en agosto, por encima del 71% de julio. El porcentaje marcó el mayor aumento de precios desde que comenzó la serie actual en 1992. Se espera que la inflación se acelere aún más en los próximos meses y luego se mantenga elevada hasta 2023, impulsada por un peso más débil”, explicó el informe económico.
Cuánto cuesta vacacionar
Así tenemos que vacacionar en enero o febrero 2023 no será nada fácil para los argentinos, sobre todos los del interior profundo, como los tucumanos, que están a 1.600 kilómetros de la playa más cerca o 2.200 kilómetros de Las Grutas o Brasil.
Por ejemplo: los alquileres de carpas en Mar del Plata tiene sus precios en función de la ubicación y el servicio y van desde los 290 mil pesos hasta 420 mil pesos la quincena.
Las playas del sur de Brasil, son de los lugares favoritos de los argentinos que eligen el exterior para descansar, según datos de páginas de turismo, una casa en Florianópolis cuesta desde 67 hasta 200 dólares por día, el equivalente a 57 mil pesos argentinos. En Camboriú se consiguen a partir de los 62 dólares por noche.
Al umbral de la pobreza
En Villa Gesell y Pinamar la quincena en enero en un departamento de tres ambientes en la parte lejana del centro llega a costar $139 mil pesos. Ese valor hace ruido ya que se acerca al valor publicado por el INDEC referido a que una familia de cuatro integrantes necesita casi $120 mil por mes para no ser considerada pobre. (Un dato al pasar).
En tanto, en un tres ambientes modesto supera los 231 mil pesos sólo por una semana. Los hoteles, en tanto, arrancan desde los 90 mil pesos por semana para dos personas.
Los alquileres de carpa en Mar del Plata varían en función de la ubicación y el servicio, pero los precios comienzan desde los 290 mil pesos hasta 420 mil pesos la quincena.
Asimismo, en Las Grutas (Río Negro) desde ya se observan aumentos de hasta el 100% respecto a la temporada pasada en los departamentos para este verano. Aducen que los aumentos tienen que ver con el mayor costo que deben pagar por la luz, el gas, el agua, el servicio de internet, y los gastos vinculados al recambio (servicio de mucama, cambio y lavado de ropa de cama y toallas, etc.) que este año se encarecieron más.
Así, alojarse una familia tipo (una pareja y dos niños) saldrá $25.000 diarios en un departamento ubicado frente al mar, con servicios básicos (wifi, aire acondicionado, ropa de cama y toallas).
Si el departamento se ubica a unas cuadras del mar, saldrá $20.000 diarios, y si está en la periferia del balneario $16.000 por día.
A todo hay que sumar el costo del viaje ya que, por lo general, la gente elige ir en vehículo propio, por lo que con el precio de las naftas más la puesta a punto del mismo (revisión técnica, alineado y balanceo de las ruedas, el seguro al día, peajes, etc.) encarece aún más la salida.
Las vacaciones 2023 pueden ser un dolor de cabeza o bien, calladito armá de nuevo la “pile” de lona en el fondo de la casa y disfrutá el verano en una reposera bajo la sombra de un árbol.