El fiscal General Federal de Tucumán, Antonio Gómez, remitió a su par, el fiscal federal Nº 2, Pablo Camuña, actuaciones preliminares sobre una denuncia de garrafas envasadas, transportadas y comercializadas ilegalmente en Tucumán, con el objeto de que ahonde en la investigación ya que tal situación representa un peligro para la salud de las personas y el medio ambiente.
La causa se inició este año y fue remitida en mayo último por Gómez a Camuña, luego de recibir una denuncia anónima por “una serie de irregularidades en las plantas fraccionadoras de Gas Licuado de Petróleo (GLP), puntualmente en Hipergas, Extragas y Propanorte, que operan en nuestra provincia.
El fiscal Gómez advirtió sobre el peligro que representan las maniobras de estas empresas en las distintas etapas de comercialización de las garrafas tanto cuando el gas es envasado puesto que los recipientes se encuentran vencidos y sin controles de seguridad como ser la prueba hidráulica.
Gómez fue más lejos y señaló que estas envasadoras utilizan garrafas y cilindros de otras marcas como Totalgas, YPF o Shell, manipulando los correspondientes precintos para colocar el de sus marcas.
Finalmente destacó irregularidades en la etapa del transporte donde se detectaron labor de transportistas no registrados ni habilitados por la Secretaría de Energía de la Nación, quienes por caminos clandestinos distribuyen las garrafas para evadir los controles provinciales.
Gómez alertó que las garrafas de gas que pueden explotar en cualquier momento al no contar con las medidas mínimas de seguridad para cargas peligrosas.