Son 4 sumergibles y una cápsula de rescate. Se prevé que llegue a la zona mañana.
Con una fuerte expectativa y casi medio día después de lo previsto, a las 13.50 zarpó la misión inédita de la Marina de los Estados Unidos que buscará al submarino ARA San Juan en las profundidades usando robots sumergibles.
Luego de las dos pistas descartadas ayer -las siete llamadas satelitales y los ruidos detectados en Península Valdés-, la salida del barco noruego Skandi Patagonia abrió una nueva esperanza, que se suma a la mejora en las condiciones climáticas que permitirán un mejor rastrillaje.
La partida desde Comodoro. (Andrés D’Elía)
Aunque ayer se especulaba con la posibilidad de que la misión saliera durante la madrugada, recién al mediodía se terminaron de cargar las provisiones de alimentos. El Skandi Patagonia fue acompañado por dos barcos guía para salir del puerto.
La misión va rumbo a la zona donde el ARA San Juan dejó de enviar su ubicación (en el golfo San Jorge, unos 400 kilómetros mar adentro). Al zarpar de Comodoro se hizo el clásico toque de sirena.
Tripulantes del barco de origen noruego. (Andrés D’Elía)
La embarcación -ocupada en su gran mayoría por militares de la Marina estadounidense- tiene por objetivo rescatar al submarino argentino que desapareció hace seis días.
Es la primera vez en la historia que Estados Unidos hace una acción de este tipo: si bien el operativo fue practicado en múltiples ocasiones, nunca se había concretado en un rescate real.
Antes de partir, los últimos movimientos de la tripulación estuvieron enfocados en la carga de provisiones: verduras, frutas y bebidas para un operativo de extensión desconocida.
La carga del Skandi Patagonia. (Andrés D’Elía)
Para llegar hasta la zona de rastrillaje, el Skandi Patagonia tardará alrededor de un día y medio. La ilusión de los familiares de los tripulantes del ARA San Juan también viaja abordo.
El barco lleva cuatro vehículos sumergibles no tripulados (un Bluefin 12D y tres Iver 580), todos operados por el Escuadrón 1 de Vehículos Sumergibles No Tripulados de la Marina de Estados Unidos.
Los equipos (que pueden llegar hasta los 260 metros -850 pies-) hacen un escaneo del fondo marino para buscar el submarino, o al menos rastros o señales de alerta que haya podido dejar a su paso.
El movimiento esta mañana en Comodoro. (Andrés D’Elía)
Son especialmente útiles en la búsqueda. Usan el sistema Side Scan Sonar que crea imágenes de áreas extensas del piso.
En caso de encontrar al ARA San Juan, la misión cuenta con una cápsula para rescatar a sus 44 tripulantes.
Al definir una ubicación, se tira al agua con el objetivo de que se acople al submarino y permita la salida de la gente.
La capacidad es limitada: entran de a seis por viaje, por lo que deberían salir en tandas. Este equipo puede alcanzar una profundidad de hasta 850 pies (260 metros).